El papel de la mujer dentro del Rock es un tema que ha dado
para escribir miles de artículos, libros y cómics. Lo que podéis leer aquí es
una recopilación de las distintas opiniones de algun@s de nuestr@s artistas más
conocid@s y por conocer. De esta forma, os haréis una idea de cómo está el panorama
respecto a este asunto de feminismo. Pasad, leed y, después, opinad.
Alice Bag (The Bangs,
Cholita! The Female Menudo, FEA):
Creo que la esencia Punk es inclusiva. No sé si lo llamaría
feminista, porque no creo que todo el mundo que estaba involucrado en el Punk
lo fuera. Creo que el Punk es inclusivo y muchos individuos se identificarían
como feministas. Pero también, a medida que te vas haciendo mayor, tienes la
oportunidad de conocer a tus héroes y algunos de esos héroes han resultado ser
muy conservadores. Así que es un poco decepcionante ver que lo que empezó
siendo inclusivo y abierto a nuevas ideas puede también volverse muy
conservador. Creo que el Punk dio la oportunidad para que todas esas cosas
florecieran, pero no pienso necesariamente que todo el mundo que estaba involucrado
en el Punk fuera feminista.
Creo que lo que más ayuda es aceptar todos los términos del
feminismo dentro del Rock y encontrar la manera de buscar puntos comunes para
poder trabajar juntos en vez de encontrar dónde somos diferentes. Necesitamos
encontrar dónde somos iguales. Y no solo con otras mujeres o músicos, también
con otros hombres. Creo que tenemos que ser inclusivos y pensar en la ideología
feminista como un de interés humano. No es solo sobre mujeres, es sobre hacer
un mundo mejor para todos renunciando a los estereotipos de género. No esperar
que los hombres encajen en ciertos estereotipos masculinos ni las mujeres en
ciertos femeninos. Haciéndolo así sería mejor para ambos géneros o para los sin
género. Lo suyo seria tratar a todo el mundo con el respeto que se merecen como
seres humanos.
Cecilia Boström (The
Baboon Show):
“Girls To The Front” es una frase que en los 90 dijo Kathleen
Hanna, de Bikini Kill, y quedó como lema de las Riot Grrrls. Algo
reivindicativo para que el mundo se entere de no solo los hombres están en él.
Es un lema para empoderar a las mujeres, para que se animen a hacerse notar en
la sociedad. Yo soy muy fan de todas esas bandas femeninas como Babes In
Toyland o L7. Ahora la frase tiene más sentido que nunca. No soy una feminista
activa, sobre todo por falta de tiempo material, pero sí soy feminista, por
supuesto. No soy radical, pero me cabrean mucho ciertos comportamientos
sociales que desprecian a las mujeres. Tampoco soy tan tiquismiquis como para
ofenderme por todo. Hay que tener sentido común. Para mí es lógico, todos somos
personas. Yo contribuyo aportando mi granito de arena al empoderamiento de las
mujeres y aprovecho cualquier oportunidad para animar a todas las chicas a las
que les gustaría subirse a un escenario, y por la razón que sea no lo habéis
hecho hasta ahora, para decirles: ¡¡Adelante, Girls To The Front!!
Agnés Castaño (Lilith,
Miss Octubre):
He tenido que currármelo más que los tíos porque, sobre todo,
es un mundo de hombres aquí, en España. Los mismos que luego se llena la boca
para hablar de igualdad para la mujer. Pura pantomima porque no nos dejan sitio
a las que llevamos décadas luchando por ello. Lo peor, y más angustiante y
decepcionante para mí, es comprobar que en la vida cotidiana las que más difícil
me lo ponen, a veces imposible, son algunas mujeres. Las mismas que,
sistemáticamente, necesitan aniquilar a cualquier otra que ellas teman que les
pueda hacer sombra. Un tópico machista de toda la vida que, desgraciadamente,
es cierto.
Vera Carrión (Mafalda):
El mundo, tal y como lo conocemos, está contado a través de
los ojos de los hombres, pero existieron a lo largo de la Historia, mujeres a
las que no hemos podido escuchar. Descubrieron, investigaron, crearon y
fallaron del mismo modo que los hombres, pero fueron silenciadas. Creemos que
ahora que el feminismo está en boca de tanta gente es un buen momento para
seguir visibilizando y normalizando todo esto, con el fin de crear referentes
para que esto no vuelva a ocurrir. Este es la razón de nuestro tema “Las Que
Faltaron”.
Jesús Cifuentes (Celtas
Cortos, Cifu, La Calaña Sound, En Solitario):
Para luchar contra el machismo y todas las desigualdades del
mundo cada uno tiene sus armas para conseguir cambiar cosas en su propia vida.
Desde luego, sería clave empezar de cero. Significa que el proyecto educativo
igualitario se empiece a trabajar desde muy pronto a través del sistema público
de educación que tenemos, el que ha recibido con la crisis tantos golpes. Todos
tenemos la estrella polar de sistemas educativos de países nórdicos como
ejemplares. Es necesaria una escuela abierta que sea un espacio para la
tolerancia y el diálogo y, así, educar en responsabilidad. Insisto, empezando
de cero. Hay que limpiar la tierra si quieres cultivar en ella.
Derry (Derry):
Cuando una mujer, en la música, tiene las cosas claras y es
directa saltan las alarmas, pero cualquier momento es bueno para detectar
gilipollas. En mi propio entorno musical me he visto señalada como prepotente,
soberbia o tirana, únicamente por ser dueña de mi destino, ser clara y, por
supuesto, ser mujer. Afortunadamente, parece que vamos en la dirección
adecuada. No hay nada que el tiempo y una buena dosis de feminismo no pueda
curar.
Nikki Sixx (Mötley
Crüe, Sixx:AM, London, Brides Of Destruction, Sister, 58):
No es cuestión de machismo, en aquella época nosotros no
respetábamos a nada ni a nadie, es jodido. Crecimos escuchando a Sex Pistols,
Buzzcocks y Black Sabbath. Mira a Ozzy, Aerosmith o Keith Richards, ¿quién se
supone que éramos? Los Back Street Boys seguro que no. Ahora veo las cosas de
forma diferente y, entre otras, apoyo al 100% al movimiento #metoo. Las cosas
hay que contarlas como fueron para aprender de ellas y no cometer los mismos
errores.
David Coverdale (Deep
Purple, Whitesnake, Coverdale&Page):
A mí me gusta un poco el cachondeo. Cuando empecé con
Whitesnake aproveché para componer canciones como: “Wine, Women An´Song”,
“Would I Lie To You”, solo para llegar a los que guardan sus pantalones, o
“Slide It In”. Son canciones muy de coña, de sábado noche con ganas de marcha
cantando a grito pelado por todo el mundo. Tienes que ser una feminista muy
estrecha de miras, muy recalcitrante, para no ver la broma. La cuestión es que,
luego, en los conciertos las que más gritaban “Slide It In” canciones eran
mujeres. Esto es para divertirse un poco. Tengo también mis canciones serias de
remate, pero otras son incitaciones a lo Little Richard para mover el esqueleto
con un buen R&R.
Kutxi Romero (Marea, En
Solitario):
“La Noche De Viernes Santo” es un homenaje a mi madre y a
todas las madres. Desde el Pleistoceno hubo una cultura de represión hacia la
mujer, que debía estar al servicio del hombre y de sus hijos. Ya va siendo hora
de que esto cambie. Yo no suelo hablar nunca de política, pero este movimiento es
necesario. Cuando alguno dice que se están pasando con no sé qué, le digo que
una historia repleta de vejaciones bien merece una venganza. Si el papel de la
mujer hubiera estado en primer plano, la humanidad hubiera ido mucho mejor.
Veremos las generaciones venideras, parece que se está adelantando en este
asunto. Ni el Rock, la carpintería o la colocación de rodapiés debe ser algo
exclusivo de hombres, para nada.
Skin (Skunk Anansie, En
Solitario):
Creo que en la situación de la mujer en el mundo ha habido
retrocesos, como en el mundo de la música, aunque, por otra parte, también ha
habido mujeres que han usado los avances conseguidos para fines más
discutibles. Por ejemplo, si una mujer se acuesta con un hombre y, por lo que
sea, tiene remordimientos al respecto, le acusa de violación para disimular así
sus propias vergüenzas. Algo así pasó con el movimiento “Me Too” que sirvió
para que algunas mujeres dañaran la carrera de hombres sin que ni siquiera
ellos pudieran acogerse a la presunción de inocencia. No deberíamos usar los
términos avances en el feminismo como una manera de castigo a los abusos
pasados y/o imaginarios, sino como una manera de solidaridad con las mujeres
que realmente han sufrido abusos. Afortunadamente, eso sí, ese porcentaje de
mujeres es muy bajo y no solo eso, sino que el porcentaje de hombres que se
aprovechan de su fuerza física o el poder que les da su situación en el trabajo
o en la sociedad es también muy bajo. Yo, que estoy rodeada de hombres todos
los días, afortunadamente, nunca me he topado con un hijo de puta. Ahora bien,
a los hijos de puta que andan por ahí hay que dejarles claro que los tiempos
han cambiado y ya no se tolerarán sus abusos de poder. Creo que todo este
revuelo ha ayudado para que muchos hombres se den cuenta de que determinados
gestos o comentarios que para ellos son unas nimiedades son, en realidad,
micro-machismos. Eso no significa que deban perder su trabajo a consecuencia de
un gesto o un comentario machista, pero sí que deben aprender de sus errores.
Cuando hablo de retroceso me refiero a que si ves la mayoría
de vídeos musicales que se emiten por las cadenas comerciales son, en toda
regla, una declaración a favor de la cosificación de la mujer. Parece que los
artistas de la radio-fómula solo muestran a la mujer como objeto sexual y no
solo ellos, mujeres como Nicki Miraj o Miley Cyrus usan su cuerpo como medio de
promoción. Si esto es resultado de su propia decisión, vale, no tengo nada que
decir al respecto, están en su perfecto derecho, pero lo inaceptable, para mí
es cuando todo esto viene impuesto por los directivos de las discográficas.
Estoy segura de que, si hubiera un movimiento “Me Too” dentro de la industria
musical, muchas historias grotescas saldrían a la luz. Yo no he vivido
historias de estas, afortunadamente. Solo de índole racista. Cuando empecé en
la música ya tenía 26 años y ya había tenido mis momentos chungos con exnovios
y exnovias o intentos de violación en la calle, situaciones que forjaron el
fuerte carácter que tengo. Siempre he transmitido una imagen de mujer lesbiana
íntegra, que no tolera ninguna tontería por parte de ejecutivos.
Suzi Quatro (Pleasure
Seekers, Cradle, En Solitario):
Quizá no me considere una pionera. Por supuesto que hubo
otras mujeres en la música que triunfaron antes que yo, pero tocando genuino
R&R yo fui la primera. O al menos la primera en lograr un éxito semejante.
De todos modos, lo del género a mí siempre me ha dado igual. Si eres bueno, no
importa que seas una mujer, un hombre, un gay o una lesbiana. No me gusta hacer
apologías de género ni nada de todo eso que se lleva ahora. Soy mujer, OK, y
estoy orgullosa de serlo. Muchos chicos y chicas colgaban posters míos en su
habitación y se masturbaban mirándolos. Para mí eso es genial.
Nita Strauss (The Iron
Maidens, LA KISS, Alice Cooper):
Si me preguntas si he tenido algún caso Me Too te diré que
sí, que he sufrido vejaciones, y no solo en el R&R. siempre me gusta
recalcar que esto te pasa ya seas luchadora de artes marciales o de lucha
libre, o una piloto de aviones o una neurocirujana. Si haces un trabajo que por
tradición han realizado hombres, te van a mirar con suspicacias. Esto es algo
que me preguntan todo el rato y no sé si yo he sufrido situaciones más graves
que otras mujeres. Yo siempre intento ser una clase de guitarrista fiable,
tanto para estar al pie del cañón como para hacerlo bien. Me presento a la hora
y no coqueteo con los demás del grupo.
Ana Curra (Alaska Y Los
Pegamoides, Parálisis Permanente, Los Seres Vacíos, Negros S.A., El Último Eslabón,
Los Vengadores, En Solitario):
A Parálisis Permanente no todo el mundo acogió con los brazos
abiertos. En Madrid, Barcelona o Valencia encontramos congéneres que iban a
nuestros bolos y compartían un lenguaje común, pero en la Transición, con el giro
político del país, empezó una apertura real y algo precipitada. De pronto, te
contrataban en un pueblo perdido para sus fiestas y te ponían a tocar en una
plaza de toros frente a las peñas del lugar. Así que, de ese modo, nos
llevábamos hostias e insultos. A Olvido y a mí nos llamaban de todo: “Bruja,
puta…”. Eso lo hemos vivido. Ir a un pueblo de Andalucía y acabar
escondiéndonos en el camerino porque nos querían agredir y luego salir de allí
escoltados por la Guardia Civil. Una locura.
Esta precariedad tenía su parte buena. Te empujaba a ponerte
las pilas y luchar por lo que realmente valía la pena. Como mujeres que
subíamos a un escenario, era algo lastimosos; en ese sentido hemos dado mil
pasos, gracias a muchas mujeres. Pero si lo hacemos extensible, también hay
mucha gente radical con el tema feminista que ha hecho mucho daño a la causa.
Y, además, por parte de las mismas mujeres. Hay gente tan extremadamente
ignorante y malvada que está tirando piedras en el tejado del avance de la
mujer. En mi vida, no he dejado de currarme eso, en mi día a día. Es una lucha
muy seria, y ver ciertas cosas es indignante. La mujer ya no está tan
ninguneada, antes nos quedábamos en segundo plano, ya nos habían educado así.
Pero hemos ido aprendiendo. Aun así, la industria y el marketing terminan por
fastidiarlo siempre todo.
Emma Ruth Rundle
(Nocturnes, Reo Sparowes, Marriages, Headles Prince Of Zolpidem, En Solitario):
No tengo respuesta a si existe una escena femenina formada
por unas cuantas mujeres y yo misma, y no sé si la hay. Es innegable que tengo
mucho en común con Chelsea Wolfe, en particular, somos buenas amigas,
compañeras de sello, además. Pero no sé si es justo hablar de una escena
femenina porque hay compañeros de sello que tienen una manera similar de relacionarse
con la música que nosotras. Tiene más que ver con el hecho de que venimos todos
del mismo sitio, con las mismas influencias. Te puedo decir que hay bandas
masculinas que están haciendo cosas parecidas a nosotros. Es evidente que
nosotras podemos aportar desde una perspectiva exclusivamente femenina, pero,
de verdad, que no quiero seguir por ese camino. Alguien me planteó, en su
momento, lo de formar mi banda solo con mujeres y me parece un reduccionismo
absurdo.
Roberto Iniesta
(Extremoduro, Extrechinato Y Tú, En Solitario):
No creo en la paridad. Cuando le dije a los que se iban
incorporando que deberíamos meter a alguien que cantara, si hubiera sido una
chica yo encantado, pero no por eso de la paridad. De hecho, de los músicos
solo elegí a Albert, que era el que conocía, y él me presentó a otros músicos
que, a su vez, me presentaron a gente que conocían. Me van a poner verde, pero
sabes lo qué pasa, que la mayoría de los cantantes con los que he cantado,
gente que colabora en los discos y así, no tienen un rango muy abierto, no me
refiero en escala, sino en maneras de cantar. Lo que tiene Lorenzo es que puede
cantar con esos súper agudos, pero también hace cosas graves, normales, o adapta
su voz a la mía. Las voces de chicas suelen ser muy bonitas, pero están muy en
su sitio. A mí me gusta hacer las canciones muy diferentes, para cantarlas de
manera diferente. No estoy cerrado a nada, si vuelvo a hacer otra banda, a la
hora de meter a alguien, miro las cualidades musicales y luego cómo es la
persona, ya sea tío o tía, me da lo mismo. Eso de la paridad es un rollo porque
somos diferentes. Cada uno tenemos nuestros gustos, nuestras aptitudes y
nuestros rollos y no hay por qué empeñarse. Eso sí, todos tenemos el mismo
derecho a conseguir lo que queremos.
Roxy Petrucci (Madam X,
Vixen):
Yo no me considero feminista ni nada de eso. Simplemente soy
una batería de R&R. escribo mis propias reglas y si alguien no quiere verme
así ya sabe dónde se puede ir. Ser mujer en el mundo del Rock puede darte visibilidad
al principio, y si tienes las tetas grandes, mejor que mejor, pero una vez que
ya has llamado la atención, más te vale que demuestres lo que vales. Como
músico, nunca me he apoyado en el tema de ser mujer, pero, por supuesto, sí que
he tratado de estar lo más atractiva posible, aunque lo haría igualmente siendo
músico o lo que sea. Lo más importante para mí ha sido convertirme en la mejor
batería que he podido ser.
Jorge Martínez
(Ilegales):
Hay que hacer caso omiso a los ofendidos, son gente con vocación
de prohibidores, no se va a poder hablar de nada, condenados al silencio
absoluto. La verdad es que estos ofendidos son una pandilla de cretinos, un
supositorio de “qué les den” y ya está. No le demos ideas a las feministas con
lo de “Eres Una Puta”, aunque hay algunas que nos son tan… en fin. Yo entiendo
la lucha de esta gente. Me parece bien eso de igual trabajo, igual sueldo y hay
que reconocer que en muchas cosas las mujeres están discriminadas, pero estas
nuevas prohibidoras, tan virtuosas, que dicen que no se puede decir esto o lo
otro… La canción “Eres Una Puta” es algo, incluso, hecho con cariño para una amiga
que le encantaba oírla y nos hemos reído con ello. Así que, si nos dice algo
algún colectivo de estos, estaré encantado de mandarlas a la mierda.
James Labrie (Dream
Theater, Mullmuzzler, En Solitario):
La base de “At Wit´s End” es un artículo que leí sobre
agresiones sexuales. Se centraba en que la sociedad no suele darse cuenta de
que las mujeres que sufren una violación no vuelven a ser las mismas después de
pasar ese trauma. Ni sus compañeros sentimentales o sus maridos pueden verlas
de la misma forma después de pasar por eso. La sociedad les hace sentir
manchadas. Es una canción en la que quería transmitir el sentimiento de una
pareja que consigue sobreponerse a todo eso.
Valerie Agnew (7 Year
Bitch):
No siento piedad, ni soltaré una lágrima, por todos aquellos
que disfrutan con el miedo de una mujer. Prefiero coger un arma y hacerles
explotar.
Kim Gordon (Sonic
Youth, Free Kitten):
Apoya el poder de las mujeres, utiliza el poder del hombre.
Apoya las flores de las mujeres, utiliza la palabra: Jódete”. (Letra de la
canción “Flower”)
Debbie Harry (Blondie,
En Solitario):
El único lugar que queda para el Rock es moverse en dirección
a más estrellas femeninas. A los hombres no les queda nada por hacer. Existirán
nuevos tíos que sean estrellas, pero no pueden expresar nada nuevo. Nosotras
sí.
Patti Smith:
Abogo por los derechos fundamentales y subrayo la importancia
del feminismo. No para enfrentar a ambos sexos, sino para unirlos y plantarle
cara a un mal mayor.
Donita Sparks (L7, En
Solitario):
Nos lo pasábamos bien desmontando el Metal. Nosotras
inyectamos feminismo en el Hard Rock y eso convirtió a algunas bandas de Metal
que eran misóginas en estereotipadas. Pero creo que la mayoría de los hombres
del Grunge eran feministas y creo que el gran legado del Grunge es cuántas
mujeres tocaban en bandas en aquel momento e, incluso, llegaron al mainstream,
a la radio o a la MTV. Fue una época muy especial.
No creo que haya nada de malo en jugar la carta del sexo y
llamarte feminista. Eso es como una tercera o cuarta ola de feminismo. A mí me
va que alguien tenga estilo y originalidad. Encuentro a muchas de esas
estrellas Pop idénticas entre sí. Me parece que ahora eso de ser una estrella
Pop está hipersexualizado. Solo espero que las mujeres que no quieren hacer eso
tengan las mismas oportunidades para avanzar en su carrera. Porque parece que
sea un requisito, un requisito autoimpuesto.
Lemmy era feminista y siempre nos apoyó. Pensaba que éramos
cool. Nos respetaba, lo que era genial.
Share Ross (Vixen,
Contraband):
Realmente no me considero feminista. Yo soy más de la
creencia de “haz tu propia vida”. Aunque a mí no me haya ocurrido, soy consciente
de que todavía las mujeres no estamos equiparadas a los hombres en algunos
aspectos y está bien seguir luchando por los derechos de las mujeres. Todos
somos seres humanos y, por supuesto, me gustaría que todos fuésemos iguales. No
sé, es algo de sentido común, ¿no crees?
Elena (Lizzies):
Las mujeres músicas, en concreto en el Rock, se están
haciendo más visibles, pero eso no significa que sea más igualitario. El
machismo está latente en nuestro día a día en todo lo que hacemos, en toda la
sociedad, es algo educacional. Desde que tenemos uso de razón ya sabemos qué
cosas son de chicos y cuáles de chicas. Puede haber más mujeres encima del
escenario, pero el trato que recibimos sigue siendo desproporcionado. Vivimos
enfrascados en un mundo dirigido por la cultura patriarcal, a la vez que en la
cultura machista, a la vez que en la cultura de la violación, y nos queda mucho
comino por recorrer. Ahora, eso sí, ojalá podamos ayudar a abrir mentes, con
que solo sea a una persona ya habremos hecho bien el trabajo. Cuando nos viene
una chica a darnos las gracias, a decirnos que ha sentido un abrazo enorme al
vernos tocar, nos sentimos bien con lo que hacemos. Eso es lo bonito y la
recompensa a todo esto.
Marty Friedman (Hawaii,
Cacophony, Deuce, Megadeth, Sound Horizon, En Solitario):
No tomábamos drogas, pero sí nos liábamos con muchas chicas.
Eso era importante para nosotros. Sabíamos que las chicas eran estúpidas, así
que, si teníamos pinta de Poison, no importaba que tocásemos una música
agresiva, dura e insana. El publico de las giras era, al menos la mitad,
femenino, así que nos arreglábamos. Teníamos maquillaje, el pelo super largo y
ropa llamativa porque eso era lo que les gustaba a ellas. Pero, cuando nos
subíamos al escenario, tocábamos esas canciones con compases raros y armonías
extrañas. Cosas que nunca escucharías a Ratt o Mötley Crüe. Pero a las chicas
no les importaba. Así aprendía que la apariencia lo es todo cuando se trata de
chicas. Si tienes las pintas, la música es una segundona distante. Y así era
como lo queríamos. Cuando terminábamos el concierto salíamos con todos los que
estaban allí y cada uno acababa cada noche en la casa de alguna de ellas. Así
nos ahorrábamos el hotel.
Judy Molish (Betty
Blowtorch):
No creo que ninguna del grupo se considerara feminista. Lo
primero que queríamos era que se nos considerara como músicos. Pero sí que nos
encontramos con problemas, no voy a mentir, a veces era difícil ser una mujer.
Recuerdo una vez, cuando “Are You Man Enough?” salió, alguna gente de la radio
nos decía: “No vamos aponerlo. Así no es como deberían sonar las mujeres.
Tenéis que sonar como The Bangles o The Go-Go´s”. Es frustrante querer ser
creativa y que tu disco esté ahí fuera y escuchar que no puede ser radiado
porque eres una mujer. Así que, de alguna manera, te fuerza a pensar en ello y
a intentar defenderte y denunciar lo que está pasando estando juntas. No porque
quisiéramos sino porque, desafortunadamente, teníamos que hacerlo. No creo que
a una banda de hombres le pasara eso, algo lamentable. Si cierras los ojos,
escuchas la música y te gusta, eso es lo que debería ser importante, no quien
la toca.
Lisa Kekaula (The
Bellrays):
De alguna manera, me considero una súper mujer. Nunca me ha
importado una mierda lo que se diga de mí. Mi único superpoder es ser yo misma
y siempre se me ha dado bien lidiar con las dificultades de la vida cotidiana.
No me verás haciendo campaña, ni liderando movimientos ni manifestaciones. Mi
compromiso es conmigo misma y con la gente que me rodea. He vivido injusticias
y me he revelado contra ellas, pero ya he llegado a un punto de mi vida en el
que no permito que nadie me haga daño. Ni por ser mujer ni por negra. ¡Por
nada!
Liza Colby (The Liza
Colby Sound):
Yo no ejerzo de feminista ni machista. Soy una mujer que se
siente bien segura acerca de su sexualidad y no me importa que cuando estoy en
mallas encima de un escenario me miren con deseo. ¡Eso es el R&R! Mucha
gente, especialmente mujeres, me dicen que no tengo por qué salir semidesnuda
al escenario, que con mi voz es suficiente. Ok, es su opinión, con la que yo no
estoy en absoluto de acuerdo. Siempre sigo que a las chicas que practican danza
clásica o gimnasia rítmica no les dicen lo mismo. En mi caso, me siento cómoda
con poca ropa y tacones altos. Es mi forma de expresarme. No hay más.
Lori (Babes In Toyland):
Aunque abogue por los derechos de las mujeres, yo no soy de
esas feministas recalcitrantes que odian a los hombres y, si fuera al revés el
nombre, podría sentirme ofendida. De todos modos, no hay que darle muchas
vueltas, es una etiqueta y si sirvió para que algunas bandas tuviéramos más
visibilidad, está más que bien. Las personas somos todas iguales. No importa de
qué sexo, creencia o género seas. Todo el mundo dentro de la música merece
apoyo y respeto. No por ser mujer, o de una banda de mujeres, debes tener un
trato especial. El resto es marketing. Riot Grrrs, Grunge, nosotras ya
estábamos tocando por ahí antes de que alguien inventara esas etiquetas.
Grunge, siempre me ha hecho mucha gracia el término. Para mí Grunge significa
algo así como que no limpiaras tu retrete en una semana.
Fotos y textos extraídos de: This Is Rock, Popular 1, La Heavy y Rock Estatal. Gracias por seguir en los kioskos cada mes.
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